Los datos del NPD Group han revelado que Call of Duty: Infinite Warfare fue el videojuego más vendido del 2016 y PlayStation 4 fue la consola más vendida de diciembre.

Los analistas de la propia firma han comentado que las nuevas consolas Xbox One S y PlayStation 4 Pro no han logrado generar un aumento en ventas.

“El lanzamiento de Xbox One S y el de PS4 Pro no han logrado generar un aumento en el gasto por parte de los aficionados”, mencionó Sam Naji, analista del NPD.

“Aunque los precios de las dos consolas de videojuego han bajado en un 15%, los aficionados han acabado comprando un 7% menos de unidades”.

La inversión en videojuegos ha caído un 15% en comparación al 2015. Además, el hardware ha sufrido la mayor caída, pues tuvo un 20% menos en comparación a la del 2015.