El desarrollo de Anthem fue más caótico de lo que uno pensaba. Un reportaje de Jason Schreier de Kotaku, detalló de sin número problemas que el videojuego tuvo en su desarrollo.

A una semana de su presentación en E3 2017, Anthem se iba llamar originalmente Beyond. Pero el conseguir la marca registrada fue complicado, obligando que a que cambiaron al nombre que conocemos ahora. El equipo estaba tan seguro que ese iba ser el nombre del proyecto que se hicieron camisas. La razón detrás de Beyond cómo nombre era para presentar más allá de las murallas que te protegen para descubrir el mundo que lo rodea.

Pero el nombre no es nada comparado con la crisis que hubo dentro del estudio. Algunos de sus empleados en Edmonton tuvieron que tomar “licencia por estrés”: un período de semanas exigidas por el médico o incluso meses de vacaciones para su salud mental. Un ex empleado de BioWare comentó que en frecuencia encontrarán una habitación privada en la oficina, cerraron la puerta y simplemente llorarían. “La gente estaba tan enojada y triste todo el tiempo”, dijeron. Dijo otro en anonimato: “La depresión y la ansiedad son una epidemia dentro de Bioware”.

Otro problema que ellos se toparon era el motor gráfico Frostbite, cual no estaba diseñado para una experiencia de juego traída en Anthem. Con FIFA siendo importante para Electronic Arts, la publicadora tomo empleados que tenían cierta experiencia con Frostbite en Anthem para que trabajaran con la franquicia deportiva.

BioWare comentó que durante la próxima semana tendrá una reunión con sus empleados para discutir este tema. También enviaron un memo indicando que no hablen con la prensa.